Por Juan Pablo Ojeda
María Corina Machado, líder opositora venezolana y Nobel de la Paz 2025, dejó claro algo que hasta ahora se manejaba como sospecha: Estados Unidos sí participó en su salida de Venezuela para permitirle llegar a Oslo, donde recibiría el galardón. Lo dijo de forma directa, frente a decenas de periodistas, sin entrar en detalles, pero con la contundencia de quien vive desde hace más de un año bajo persecución política.
Aunque ella evitó profundizar, varios medios internacionales reconstruyeron su ruta de escape. Según The Wall Street Journal, todo comenzó el 8 de diciembre, cuando salió de su escondite en Caracas tras 16 meses en la clandestinidad. Con peluca y disfraz, recorrió diez horas por carretera y pasó por diez retenes militares sin ser detectada. Desde allí tomó una lancha de madera rumbo a Curazao y luego un avión privado que hizo escala en Maine, Estados Unidos, antes de aterrizar finalmente en Oslo.
Su equipo mantuvo el viaje en absoluto secreto para reducir riesgos, conscientes de que cualquier filtración podía poner en peligro su vida. Machado explicó que asistir al Nobel no era un acto personal, sino un compromiso con los venezolanos, a quienes —dijo— debe llevar de regreso el premio como símbolo de resistencia.
📺TV EN DIRECTO | María Corina Machado: "Me preguntaron si habíamos recibido apoyo del Gobierno de Estados Unidos para que yo pudiera llegar a Oslo. La respuesta es sí" https://t.co/Z0c9SGR9in pic.twitter.com/s2O7xokeiW
— EL PAÍS (@el_pais) December 11, 2025
La opositora aseguró que planea volver “pronto” a Venezuela, aunque sin fecha ni ruta definida, pues su retorno dependerá de que existan las condiciones mínimas de seguridad. Aclaró que eso no tiene que ver necesariamente con la continuidad de Maduro, sino con garantizar que regresar no ponga en riesgo su integridad.
Por ahora, dedicará unas horas a ver a su familia, atender su salud y sostener reuniones clave antes de preparar su retorno. Su mensaje fue firme: el premio es una parada temporal, no un exilio.
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