Por Juan Pablo Ojeda
La Ciudad de México cerró la madrugada del 12 de diciembre con una cifra impresionante: alrededor de 13 millones de personas acudieron a la Basílica de Guadalupe para festejar a la Virgen en su día. El Gobierno capitalino informó que este número corresponde al corte de las 05:00 horas, cuando terminó el flujo más intenso de visitantes, aunque se espera que más peregrinos sigan llegando hasta el 14 de diciembre.
Durante la jornada, los servicios médicos trabajaron sin pausa. En el atrio se brindaron 3,441 atenciones, mientras que en los alrededores se ofrecieron 2,476 más, casi todas por cansancio, deshidratación o pequeñas lesiones. Solo ocho casos ameritaron traslado a un hospital, lo que muestra que, pese a la enorme afluencia, la situación se mantuvo bajo control. Locatel también recibió 58 reportes de extravío, de los cuales seis siguen activos.
Con el descenso de la mayor concentración de visitantes, brigadas de paramédicos, voluntarios y puestos de atención iniciaron el retiro gradual de su infraestructura, aunque la brigada médica de la propia Basílica permanecerá activa por cualquier eventualidad que pueda surgir en los próximos días.
La vigilancia también continúa. La Secretaría de Seguridad Ciudadana mantiene patrullajes en las zonas donde aún pernoctan grupos de peregrinos. En total, 5,080 elementos participan en el operativo, apoyados con 255 vehículos, 145 camionetas, 73 motocicletas, 15 grúas, 13 ambulancias, cinco motoambulancias, dos drones y dos helicópteros, distribuidos en rutas clave como las calzadas Ignacio Zaragoza, Tlalpan e Insurgentes.
La limpieza ha sido otro reto monumental. La Alcaldía Gustavo A. Madero informó que se retiraron 980 toneladas de residuos acumulados durante la celebración, en coordinación con personal del Gobierno capitalino. Además, se reportó el rescate de 16 perros, que ahora recibirán atención veterinaria y serán canalizados a procesos de adopción.
Con la devoción intacta y la logística operando a máxima capacidad, la capital se prepara para los días finales de una de las movilizaciones religiosas más grandes del continente.
Deja una respuesta